Este local se abrió con la intención de
ser un punto de encuentro de los ciclistas de la ciudad y su actividad es de lo
más variopinta: cafetería y venta y reparación de bicicletas.
Al igual que el uso del local parece un collage de actividades, el desarrollo formal también se basa en este concepto. La materialización de revestimientos, mostradores y mobiliario se hace a través de piezas recuperadas y adquiridas al por mayor en almacenes de carpintería.
El solado se resuelve formando un mosaico
con distintos tipos de madera, tableros contrachapados, de encofrar, MDF, ...
Se prolonga además hacia distintos paramentos verticales y conforma con el
mismo patrón gráfico los mostradores de la zona de tienda, de la cafetería y asientos bajo ventanales.
Funcionalmente, el local está dividido
en tres zonas: la de cafetería, un espacio abierto con baño compartido y la de
reparación de bicicletas.
La zona de la barra de cafetería se
sitúa en una esquina junto a un ventanal y está resuelta mediante pintura
pizarra (más sobre este tema, en MARQ / propuesta / pintura pizarra) y lámparas de bola
blanca que le aportan, junto con la madera, calidez a ese espacio.
arquitectos / super super / MOKO Architects
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